
Fuimos testigos de algo muy interesante en los últimos días, en el contexto de la reciente disputa entre Trump y Musk.
Los titulares pasaron de hablar de disturbios mundiales, poderes de emergencia de la OMS y vigilancia de Palantir a «¿quién le dijo qué a quién?». Las masas pasaron de la indecisión a la obsesión, apresurándose a elegir un bando y expresar sus opiniones en línea.
El momento siempre es perfecto ¿no?
Toda distracción tiene un propósito, todo circo tiene un líder, y mientras el público discute sobre payasos, los arquitectos planean el siguiente acto…
En este caso, el siguiente “acto” es la implementación de un sistema satánico de gobierno mundial.
IA, control digital, biometría, etc.
El sistema de la bestia está a punto de completarse. «Ellos» nos han advertido subliminalmente que se avecina.
Y ahora que la élite está absuelta de su «deuda kármica», pueden mantener a las masas discutiendo sobre multimillonarios mientras se les colocan las cadenas.
–
FUENTE