El estado de vigilancia autoritaria de Orwell por fin está aquí:
Los fans de Amazon seguro que son receptivos a la última tecnología del gigante del comercio electrónico, los televisores Fire, porque simplemente harán que la transmisión de las ofertas de vídeo, programas y películas de la compañía sea mucho más fácil.
Lo que la empresa no dice a los propietarios de esos nuevos televisores, que empiezan a enviarse en octubre, es que literalmente estarán invitando al estado de vigilancia gubernamental del que advirtió el visionario autor George Orwell en su profético libro «1984».
The Verge, un sitio que informa sobre tecnología, señala:
Amazon está oficialmente en el negocio de la televisión. La compañía ha anunciado su primera línea de televisores Fire 4K de la marca Amazon, que comenzarán a comercializarse en octubre. Se trata de una importante ampliación de las colaboraciones «Fire TV Edition» de la empresa, en las que su popular software de streaming viene precargado en aparatos fabricados por otros fabricantes de televisores. Pero con sus nuevas series Omni y 4, Amazon las describe como «televisores construidos por Amazon».
La serie Omni es la más alta de las dos, y además de ofrecer una mejor calidad de imagen, su otro punto clave de venta es el control de voz con manos libres. Amazon incluye micrófonos de campo lejano en cada modelo de la serie Omni, que viene en 43, 50, 55, 65 y 75 pulgadas. (Solo los modelos de 65 y 75 pulgadas tienen Dolby Vision, pero los demás al menos tienen HDR10).
Genial, ¿verdad?
The Verge continúa señalando que, al construir el televisor, los ejecutivos de Amazon creen que podrán «crear una experiencia de usuario de Fire TV más fluida» que antes, cuando los usuarios tenían que utilizar el «stick» de Fire, un dispositivo de streaming que se conecta a otros televisores ‘inteligentes’.
Pero aquí está la trampa. La nueva tecnología realmente sólo da a Amazon y, por defecto, al gobierno, una capacidad más fácil de escuchar a los propietarios de televisores.
«Amazon cree que los controles de voz de Alexa añaden un importante factor de comodidad», informa The Verge.
«En los televisores Omni, los comandos de voz están siempre disponibles, incluso si el televisor está apagado. Estos comandos de voz se pueden utilizar para encontrar algo que ver, como de costumbre, pero también se puede ajustar el brillo del televisor, el volumen o cambiar las entradas con Alexa», continúa el medio.
Sin embargo, como ha informado Natural News, estos módulos y dispositivos de «comandos de voz» que decenas de millones de estadounidenses tienen en sus casas son todos dispositivos secretos de escucha y grabación.
Cuando estos dispositivos, como el Echo de Amazon, se popularizaron por primera vez, se introdujeron como parte del «internet de las cosas» (IOT, por sus siglas en inglés), por el que más tecnologías para nuestros hogares y negocios se conectaban a internet. Qué cómodo sería, por ejemplo, estar en el trabajo y ajustar la temperatura de tu casa; poner alarmas; activar medidas de seguridad, etc. Sólo que, como afirma The Verge, estos dispositivos están constantemente a la escucha de órdenes, lo que significa que, por diseño, siempre están escuchando.
Y como están conectados a Internet, eso significa que están sujetos a la «vigilancia» de una plétora de agencias gubernamentales, así como de hackers.
Lo informamos:
Al igual que el iPhone de Apple, que contiene un aparato de escucha a través de «Siri» que se puede activar en una habitación simplemente hablando en voz alta, el Amazon Echo está programado para escuchar ciertos comandos verbales que le dicen que se encienda, por ejemplo, o que se conecte a una determinada aplicación. Amazon dice que el dispositivo contiene un «reconocimiento de voz de campo lejano» que puede escuchar la voz de una persona en toda la habitación, incluso mientras suena la música.
Pero este sueño tiene un precio, advierten los escépticos que han investigado la capacidad del Amazon Echo para espiar a la gente y entregar información a los hackers o incluso a los funcionarios del gobierno.
Al fabricar sus propios televisores, Amazon simplemente se salta los dispositivos ‘intermediarios’ que la gente puede o no comprar (casi todo el mundo tiene un televisor y si es uno que puede hacer todas esas ‘cosas guays de Amazon’, mucho mejor).
¿Harán estas empresas tecnológicas productos que el gobierno pueda explotar? Por supuesto; permitir ese acceso significa que el Estado profundo del Tío Sam no perseguirá a los gigantes tecnológicos con regímenes regulatorios que los dejarían fuera del negocio.
Bienvenidos a «1984» de Orwell. Hemos llegado oficialmente.
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FUENTE
JD Heyes
cybermedios.org 