Una nueva investigación de la Universidad de Stanford indica que, en un futuro próximo, las inyecciones de líquido cefalorraquídeo recogidas durante los abortos combatirán la senilidad y aumentarán la longevidad.
El anuncio no ha sorprendido a la doctora Doro Hurgerson, asociada de Planned Parenthood. «Estamos al tanto de varios estudios similares y esperamos proporcionar materiales viables al mercado comercial una vez que se completen los ensayos en humanos», declaró.
La doctora continuó explicando que el líquido cefalorraquídeo se encuentra en el tejido que rodea el cerebro y la médula espinal y es producido por células ependimarias específicas en el plexo coroideo de los ventrículos del cerebro. Cuando se le preguntó si el desarrollo del feto podía influir en la «cosecha» del líquido cefalorraquídeo, respondió: «Por supuesto. Cuanto más avanzado esté el desarrollo, mayor será la cantidad de LCR. Un aborto de nacimiento parcial proporcionaría la mayor cantidad».
Hurgerson indicó que el modelo de negocio de Planned Parenthood se vería gravemente dañado si se anula el caso Roe vs Wade. «Una cosa que no queremos es que los estados hagan sus propias leyes sobre el aborto. Somos un negocio nacional y no queremos tener que adaptar nuestro modelo de negocio a los caprichos de los residentes locales.»
«Sin embargo, aplaudimos los cambios realizados por las leyes de aborto en dos estados que ahora permiten a las mujeres abortar a los 9 meses. Preferiríamos que todos los estados siguieran su ejemplo, pero, por desgracia, eso es poco probable si el Tribunal Supremo sigue la Constitución, al menos tal y como está escrita actualmente. Por supuesto», continuó. «Estamos patrocinando una legislación que garantizaría nuestra capacidad de hacer negocios… um, apoyar los derechos de las mujeres y las niñas a interrumpir sus embarazos por cualquier razón que elijan».
Preguntada por el futuro de Planned Parenthood, indicó que aunque las importaciones chinas probablemente siempre van a ser una preocupación, el futuro parece brillante. «Si la investigación continúa como se espera, prevemos una gran demanda en la oferta de nuestros servicios. Si conseguimos que se elijan suficientes legisladores proabortistas y que se apruebe un proyecto de ley de aborto a petición de 9 meses, podremos ampliar considerablemente nuestras operaciones. Nuestro objetivo es poder ofrecer un pequeño estipendio a la portadora del feto en función del número de meses de gestación. Dado que la cantidad óptima de LCR es a los 9 meses, poder cosechar mediante un aborto de nacimiento parcial a los 9 meses daría el mayor retorno de la inversión».
Hurgerson continuó diciendo que era probable que sólo los muy ricos pudieran permitirse los tratamientos.
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