Suiza forma para del grupo de países cuyas leyes permiten alguna forma de eutanasia o suicidio asistido. Ahora, han dado un paso más aprobando el uso de máquinas “Sarco”, en esencia, cápsulas impresas en 3D diseñadas para su uso en el suicidio asistido.
Estas máquinas, que iniciaron su andadura en los Países Bajos de la mano del doctor Philip Nitschke, son unas cápsulas similares a un ataúd que deberían estar listas para operar en Suiza en 2022.
Como informan en Swiss Info, si bien el enfoque actual del sector suizo de muerte asistida requiere la ingestión de pentobarbital sódico líquido, las máquinas Sarco pueden proporcionar una muerte pacífica sin el uso de sustancias controladas. Según ha explicado Nitschke:
El beneficio para la persona que lo usa es que no tiene que obtener ningún permiso, no necesita un médico especial para tratar de colocarle una aguja, y no necesita obtener medicamentos difíciles de conseguir.
–
FUENTE Y LEER COMPLETO EN: