Los estudios científicos demuestran que la idiocracia está muy avanzada. Los occidentales han perdido 14 puntos de coeficiente intelectual de media desde la época victoriana, según un estudio publicado por la Universidad de Ámsterdam en 2018.

Se percibe una relación entre el CI y la fertilidad. Esto es polémico porque el cosmopolitismo «globohomo «inclusivo» se niega a reconocer que hay diferencias cualitativas entre los subgrupos humanos. Pero Jan te Nijenhuis, que dirigió el estudio de Ámsterdam, cree que la causa próxima de la caída se debe a que las mujeres inteligentes tienden a tener menos hijos que las que no son tan listas.

El Dr. Nijenhuis examinó los resultados de 14 estudios sobre inteligencia realizados entre 1884 y 2004 para llegar a su conclusión. Cada estudio medía los tiempos de reacción, es decir, el tiempo que tardaban los sujetos en pulsar un botón después de que se les pidiera que lo hicieran.

La base del estudio afirma que el tiempo de reacción refleja la velocidad de procesamiento mental, y que esa velocidad es un reflejo de la inteligencia. Los médicos descubrieron que el tiempo de reacción visual era, por término medio, de 194 milisegundos a finales del siglo XIX. En 2004, había aumentado a 275 milisegundos.
«La reducción de la inteligencia humana habría comenzado en el momento en que la selección genética se relajó», dijo el Dr. Gerald Crabtree, profesor de patología y biología del desarrollo en la Universidad de Stanford.

Hay un factor secundario, además de la genética, en la cuestión de la idiocracia: la cultura. Un estudio realizado por el profesor Fynn descubrió que los adolescentes más brillantes que participaron en un estudio de 2008 eran, de media, 6 puntos de CI menos inteligentes que sus homólogos examinados 28 años antes. Los científicos descubrieron que el rendimiento descendía de forma más drástica entre los adolescentes situados en la mitad superior de la escala de inteligencia.

El profesor Fynn dijo que los resultados podrían ser el resultado de una cultura juvenil menos inteligente. Lo que sabemos es que la cultura juvenil está ahora más orientada a lo visual, centrándose más en los juegos de ordenador que en la lectura y las conversaciones». Otros estudios han demostrado lo omnipresente que es la cultura juvenil de los adolescentes, y lo que vemos es que la influencia de los padres en el coeficiente intelectual disminuye lentamente con la edad, dijo.

La nutrición también influye en el desarrollo mental, y en la cultura actual se trata de un «laissez-faire» promovido por los corporativistas. El Estado nacional tiene el deber de revertir esta situación. El Estado nacional debe actuar con firmeza contra los agentes del medio ambiente que afectan al desarrollo y la salud de los seres humanos.

El otro problema va a ser la bestia de la tecnología 5G, que será debilitante, especialmente en los niños. Las microondas abren la barrera hematoencefálica.

Ni que decir tiene que los cierres y el uso de mascarillas son un atentado contra el bienestar humano.

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IMPORTANTE: SÓLO RETOMO LA PARTE QUE ME HA INTERESADO Y ME PARECE CONGRUENTE DE ESTE ARTICULO.

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Unless Smart Choices are Made About Human Direction, an Idiocracy is Inevitable