NOTA MIA: Pronóstico que este académico-meme algún día reinará y alzará sus batallones woke contra las ciencias y pensamiento lógico-formal que aún resten por caer (Jorge Lizama)
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Ya hemos hablado anteriormente de las declaraciones radicales del Director de Estudios de Posgrado de Historia de la Universidad de Rhode Island, Erik Loomis, que ha defendido el asesinato de un manifestante conservador y ha dicho que no veía «nada malo» en tales actos de violencia. (Una opinión defendida por otros académicos). Ahora Loomis vuelve a ser noticia por una declaración en la que afirma que «la ciencia, la estadística y la tecnología son inherentemente racistas porque son desarrolladas por racistas que viven en una sociedad racista, se identifiquen o no como racistas». Es una postura curiosa por parte de la persona que dirige los estudios de posgrado en historia en la Universidad de Rhode Island.
Para muchos, la ciencia y la estadística son campos intrínsecamente objetivos y no racistas. Si bien es cierto que el racismo puede afectar a cualquier campo de múltiples maneras, estos campos se basan en experimentos y cálculos probados. Uno puede apoyar el escrutinio de nuestros programas para erradicar el racismo sin descartar todos los campos como «inherentemente racistas». Sin embargo, esta visión de las matemáticas y la ciencia está siendo expresada por otros, incluidos los que denuncian las matemáticas como una «herramienta de la blancura».
La declaración de Loomis se produjo como parte de un tuit en referencia a un artículo del New York Times y añadió «Por eso siento tanto desprecio por aquellos, incluidos muchos liberales, que «sólo quieren los datos». Los datos son racistas».
He defendido el derecho de Loomis a hacer sus comentarios anteriores como una cuestión de libertad de expresión. Aunque Loomis no ha mostrado más que intolerancia hacia las opiniones contrarias, tiene todo el derecho a expresar opiniones perturbadoras y extremistas.
En esta ocasión, hace una declaración que parece socavar la base de los estudios de posgrado en su escuela y en otras. Aunque sigo considerando que las declaraciones están protegidas, parecen socavar la fe en la base de gran parte del trabajo de sus colegas». El tuit hizo que el director adjunto de comunicaciones de la Universidad de Rhode Island, Dave Lavallee, emitiera un comunicado:
«Las recientes publicaciones del Sr. Loomis en las redes sociales sobre la ciencia, la estadística y la tecnología son enteramente sus propias opiniones, y de ninguna manera representan las posiciones o los valores de la Universidad de Rhode Island… Su reciente tuit va completamente en contra del primer valor de la piedra angular de la URI, que dice: ‘Perseguimos el conocimiento con honestidad, integridad y coraje’.
Al hacer estos comentarios, el Sr. Loomis pone en tela de juicio el trabajo de miles de investigadores y científicos en todo el país y, en particular, el excelente trabajo realizado por nuestros talentosos y diversos investigadores en URI. Aunque el Sr. Loomis tiene el derecho de la Primera Enmienda a hacer tales comentarios como ciudadano privado, no tiene derecho a hacer tales afirmaciones sin fundamento en el contexto de su posición o función universitaria».
Desde mi punto de vista, el aspecto más importante de esa declaración es el reconocimiento de que Loomis tiene la protección de la Primera Enmienda al emitir esos puntos de vista. La cuestión para la universidad es si esos puntos de vista socavan su papel en la dirección de los estudios de posgrado, en particular al desestimar la base misma de gran parte de ese trabajo como racista. Loomis afirma que «toda» la ciencia, la estadística y la tecnología son racistas. Y punto. Es una afirmación evidentemente absurda que carece de cualquier fundamento o investigación intelectual. Sin duda, atraerá a muchos que se deleitan con las opiniones extremistas y de rechazo, incluidos algunos en el mundo académico. Sin embargo, es la antítesis de nuestra misión intelectual como académicos y hace un gran daño a los muchos académicos respetados de la Universidad de Rhode Island.
No obstante, Loomis escribió una columna titulada «When Fascists Attack» (Cuando los fascistas atacan) para el sitio Lawyers, Guns, and Money. Loomis aparece como uno de los pocos «miembros» que contribuyen al sitio. (Para que conste, es el mismo sitio que publicó una columna de un profesor de derecho de Colorado que afirmaba que plantear preguntas sobre el 2020 era similar a la negación del Holocausto. Ese ataque se produjo unos días después de las elecciones, cuando señalé que había irregularidades en las elecciones, incluido un error en la comunicación de los resultados de un distrito que utilizaba el software Dominion. Señalé que el error, que afectaba a unos pocos miles de votos y que se corrigió rápidamente, no indicaba ningún fraude generalizado y no afectaría al resultado de las elecciones. Simplemente planteaba la cuestión de si tales sistemas seguían siendo vulnerables al «error humano». El sitio denunció que esa afirmación era similar a negar que el Holocausto hubiera ocurrido).
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FUENTE
cybermedios.org 